En una entrada pasada escribí por que las personas deciden entrar a la escuela de Medicina, así que consideré lo justo que yo exponga ante ustedes mis motivos. Para esto dividiré la idea en dos: por que entre
y por que me he mantenido en ella.
A la hora de decidir que queria hacer con vida pude separar 3 carreras que me hubiera gustado cursar: fisica, economia y medicina. La física no la elegí por que tendría que estudiarla fuera y no podía costearla,
la economía la descarte por que no me llamaba mucho la atencion pertenecer al organigrama de una empresa.
Elegí Medicina primero que todo por que me aseguraba un empleo en casi cualquier parte del mundo, y sentía curiosidad por las ciencias biológicas, segundo el empleo que nos ofrece es parcialmente ajeno a las crisis económicas y tercero este empleo me ofrece la emoción de que no se que me espera específicamente en el hospital cada día.
Me he mantenido en ella por que en verdad me gusta: cada día que voy al hospital encuentro algo nuevo que aprender del ser humano y sus enfermedades. Ademas de que le he tomado algo de aprecio al carácter humano de la Medicina: debemos ser sanadores del sufrimiento humano.
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