martes, 22 de febrero de 2011

Espíritu Quirúrgico

Hoy una señorita a la cual le tengo demasiado aprecio por que tuve el privilegio de hacer todos mis años del colegio con su hermana y a cuya familia conozco relativamente bien, me contó que fue su primera cirugía y cuanto le fascino.

Al ella contarme esto me alegre tanto, y pensé en retrospectiva que no hace mucho tiempo ella estaba preocupada por anatomía, que la bioquímica no tiene sentido y que la histología-patología si son problemáticas. Ella sin darse cuenta ya esta mas cerca de ser una doctora que de ser estudiante de Medicina, ya esta siendo expuesta ante los verdaderos maestros de la Medicina: los pacientes.

Espero que esa emoción por las cirugías y el examen físico de los pacientes, se mantenga en ella a lo largo de su carrera pues es lo que verdaderamente separa al buen medico del medico de profesión: el entusiasmo.

Solo pude recordar aquel momento, mi primera cirugía, donde por primera vez vi la verdadera desnudez del cuerpo humano, aquella que vas mas allá de los genitales y descubre la anatomía y fisiología de un ser humano por debajo de la piel y que aun sigue vivo. Espero que ella tenga pronto la oportunidad de seguir un paciente desde el cuidado pre-quirúrgico hasta el cuidado post-quirúrgico y subsiguiente de alta hospitalaria y pueda ver a través de todo este proceso el cuidado que se requiere para mantener a un ser humano vivo y como damos cosas como el latir del corazón, la respiración y la ausencia del dolor e infecciones por sentado en nuestra vida diaria.

Así que querida amiga mía bienvenida a la parte mas hermosa de la Medicina: cuidar a nuestros pacientes, y a todos aquellos que se encuentran en este punto o mas allá, nunca olviden maravillarse en nuestra carrera.

1 comentario:

Josseiris Cuevas dijo...

Buen post lentecito (*) ::)
Saludos.